lunes, 22 de octubre de 2012

MEDIO MARATÓN NOCTURNO DE BILBAO

Este es el resumen de mi paso por el Medio Maratón Nocturno de Bilbao...aunque en realidad, eso es lo de menos. Sólamente era la excusa para pasar un fin de semana fabuloso con Judith, ahora que por motivos de estudios nos vemos con menos frecuencia.


Llegué a Bilbao en bus el sábado por la mañana desde Vitoria. Un viaje muy agradable pasando por distintos pueblos vascos metidos con calzador entre montañas verdes y niebla baja de esa que solo se ve por aquí. La idea era leer el libro que llevo a medias (Scarpetta, de Patricia Cornwell), pero lo cierto es que me pegué todo el trayecto mirando por la ventana y escuchando música. Al llegar a Bilbao, me tocó esperar media horita al bus del aeropuerto porque en él llegaba Judith directa desde Barcelona en un vuelo Ryanair. Una espera que merecía la pena...lo bueno siempre se hace esperar. Desde la estación, (pegada al estadio de San Mamés), fuimos andando directos al Gran Hotel Domine Bilbao (justo entrenfe del museo Guggenheim) para recoger el dorsal y la camiseta. Número 2628, camiseta verde de manga corta...otra más para el armario.




Tras pasar por la oficina de turismo y mapa callejero en mano, nos dirigimos hacia la pensión que reservé hace unos días totalmente cegado por su bajo precio. Por respeto a la dueña y sobre todo, porque quiero borrar de mi mente todo lo relacionado con ese  siniestro lugar, me voy a permitir no hace ningún comentario. Eso sí, en comer no hemos dejado de lado la calidad porque la oferta de platos y pintxos buenos de Bilbao es impresionante! Al final de la lectura y a modo de regalo, he puesto unas deliciosas fotos de lo que nuestros paladares han podido saborear estos dos días...

Siguiendo con el hilo del sábado; tras pasar por la pensión nos fuimos a comer un apañado menú del día, echamos la siesta, salimos a mitad tarde a tomar un Txacolí con unos amigos que conozco allí, volvimos al cuarto para que yo me pudiese disfrazar del corredor del CAB y....al Guggenheim que a las nueve de la noche empieza el lio!!

En principio, quedé con el otro y único participante barbastrense debajo del gato de flores que hay a la puerta del museo para hacernos la foto de rigor. Ese hombre no es ni más ni menos que nuestro excelentísimo e ilustrísimo Presi Torres, que como le van las emociones fuertes participaba en el maratón 42K. Debido a mi no recomendable costumbre de llegar tarde a todos los sitios, aparecí bajo el gato a las 20:40 y como es lógico, el Presi ya se había ido a calentar las patas. Por fortuna, mi  espectacular e innato dominio del Paint me ha permitido elaborar una recreación de lo que podría haber sido aquel entrañable momento...
Llovía sobre Bilbao. Sin embargo, allí estábamos unos cuantos debajo del Guggenheim dispuestos a correr 7K (Carrera Pirata), 21K (Medio Maratón)  ó 42K (Maratón). A la hora señalada comenzó una espectacular cuenta atrás al sonido de The Final Countdown seguida de llamaradas y fuegos artificiales. Salíamos por cajones de tiempo. La casualidad hizo que el Presi y yo saliéramos en el mismo. Gracias a una pantalla gigante colocada bajo el arco de salida, pude ver desde la parte de atrás del pelotón que él estaba colocado en la primera fila del grupo con su gorra blanca y su indumentaria del CAB. Así por lo menos ya lo tenía medio localizado...



Mi idea era hacer la carrera prudentemente junto al globo de 1h45, que en este caso era el de 3h30. Como yo salí por detrás y él por delante, al principio tuve que apurarme para alcanzarlo y no lo conseguí hasta el K3 (Gran Vía). Una vez allí, me vi fresco y fino, conque de nuevo (parece que no aprendo...) me la jugué y tiré hacia delante. Pronto dejé atrás al globo y empecé mi "propia" carrera. A mi ritmo. A mi aire. Sin ir con nadie en especial. Según lo que me dijeran las piernas y la cabeza. El clima era perfecto para correr! Hacía fresquito sin ser frio y caía una finísima lluvia que refrescaba sin llegar a mojar demasiado. Sobre el K6 (Casco Viejo) y llegando a un cambio de sentido, me crucé con el Presi que iba pegado como una lapa al globo de 3h15...

Los kilómetros iban pasando y sorprendentemente yo seguía a mi bola adelantando gente y avanzando a un ritmo alto para mí, pero sin apenas cansarme. La lluvia apretó y dejo de ser ese famoso chirimiri vasco para ser un chaparrón en toda regla! Más que correr parecía que veníamos de darnos un baño con ropa en la Ría. Sin embargo, a mí me daba igual y seguía a buen ritmo con la motivación por las nubes. Sobre el K12 (zona de San Ignacio) pillé al globo de las 3h15 donde continuaba anclado el Presi Torres. Nos saludamos y le comenté "voy asustao de lo bien que me encuentro". Tanto es así y tan buenas eran las sensaciones, que me permití el lujo de dejar atrás a ese grupo de galgos y seguir haciendo "mi carrera" hasta que me lo permitiera el organismo.

Entrando a meta

Todo fue bien hasta el K17 (avenida Universidades), donde ya empecé a notar algo de cansancio. Las piernas me pesaban un poquito y la plantilla de la zapatilla derecha se había movido y arrugado por culpa del agua de lluvia. Era como si pisara encima de una piedra conque en el avituallamiento del K19 (Ayuntamiento), decidí parar a caminar unos 50 metros para beber agua más tranquilamente y quitarme un poco el dolor del pie. Como no podía ser de otra forma, justo en ese momento me adelantó el globo de 3h15 con el Presi Torres siguiendo su rebufo. El diálogo fue el siguiente:

-Presi Torres: Venga Martín ostiaaaaaaa!!! ¿Qué haces ahí parado? ¡¡Ánimo que ya no te queda nada!!
-Martín: ¡¡Tranquilo, es solo para beber agua pero voy bien!!

(Ahora lo que Martín pensó y no dijo: "joder, pa uno que conozco en toda la ciudad y me tiene que ver andando" jajajajaj)

El caso es que tras ese cortito momento de relax para mis piernas, llegué de nuevo a la meta del Guggenheim sin problemas aunque el último kilómetro se me hiciera un poco largo. Enfilé la recta de meta, vi a Judith esperándome bajo su paraguas, le saludé en señal de enorme agradecimiento, crucé el arco y dí un grito de alegría porque me imaginaba que había hecho un tiempo muy bueno. Lo necesitaba tras el "tropezón" de Barbastro. Paré el cronómetro y en la pantalla apareció un magnífico registro de 1h39min12seg. Cojonudo. Menos tiempo del que me esperaba y unas sensaciones perfectas que me han vuelto a levantar la moral hasta el lugar desde donde se lanzó el otro día Felix Baumgartner. Mi medio maratón número 15 ha resultado ser una carrera perfecta. 


Posando con el paraguas al terminar
Recogimos los bártulos, volvimos a la pensión, me duché y salimos a cenar a la zona del Casco Viejo. Eran las 00:10 de la noche cuando pasábamos con Judith buscando cena caliente por la Plaza Circular, K40 del maratón. Todavía corrían por allí los que lo iban a terminar entre las 3h y las 3h15min. O sea...unas putas máquinas! Sin embargo, era un panorama algo desolador el que se veía porque a esas horas y lloviendo ya no quedaba casi gente animando en la calle. Lo de empezar a correr un maratón a las nueve de la noche hay que pensárselo mucho...

De turisteo por Bilbao
  



 El domingo lo dedicamos al tapeo y el turismo. Un buen desayuno para cargar las pilas, un paseo por la Ría bajo la intensa lluvia y a la hora de comer al Guggenheim que, casualidades de la vida, no sé qué aniversario cumplía pero la entrada era gratis. Y menos mal, porque no volvería a pagar por unas exposiciones de arte contemporáneo que ni entiendo ni creo que pudiera llegar a entender algún día. La tarde la comenzamos con siesta y la finalizamos con una ronda de bares y pintxos por Bilbao, todos ellos bien regados por sus respectivas copas de Txacolí y tinto. En resumen: plan perfecto, compañía perfecta, carrera perfecta. Salvo el tema de la pensión y la lluvia que no ha dejado de acompañarnos...fin de semana perfecto!!! Con toda esta mezcla de elementos...resultaba imposible que algo saliera mal.

Y ahora...la MUESTRA GASTRONÓMICA!! (para que conste que nos sabemos cuidar)


Paella

Hojaldre con setas y bacon

Tortilla de patata con chorizo, jamón y queso fundido

Dos tartaletas con un Txacolí y un Pruno

Paté con almendrás, queso de cabra con mermelada y Txacolí

Desayuno del domingo: tostada de jamón,  tortilla de bacalao y café con leche

Pizza de champis, jamón y salsa de yogur

Saludos desde Vitoria-Gasteiz!!

8 comentarios:

  1. GRANDISIMA CRÓNICA, NO VEAS COMO ME HE REIDO...YO TODAVÍA INMERSO EN LA MIA....QUE COMO TE DECÍA...ES EL DOBLE, JAJAJAJA....LO DE LA PENSIÓN...LO PUEDO LLEGAR A IMAGINAR (DEBERIAS HACER UNA ENTRADA)..YO TE CONTARÍA DE UNA EN GRANOLLERS...QUE TELITA!....ENHORABUENA POR LA MARCA Y LÁSTIMA DE NO HABER COINCIDIDO PARA LA FOTO OFICIAL!

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    1. Un fín de semana muy majo el que pasamos por Bilbao...sí señor! No sé cómo sería esa de Granollers, pero te aseguro que esta de la que te hablo es muy surrealista y dificil de imaginar! jajaja

      Lo de la foto es un mal sin importancia, ya has visto que mi manejo del Paint es sobrecogedor...

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  2. Enhorabuena Martín. Gran cronica,gran carrera y grandes....tapas

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    1. Eso siempre! Hagas lo que hagas...tapas que no falten! jajaj Gracias Javi

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  3. El foto montaje no tiene precio......jajaja. Enhorabuena por la carrera.

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    1. Gracias Rafa! Lo cierto es que sería un sin-sentido decir lo contrario...jajajaj

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  4. jajaja para haber andado tanto rato 1:39 es la repera. Enhorabuena parece que te has recuperado.

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    1. La verdad que sí, estoy bastante contento aunque ya se sabe que esto va por días. Un abrazo y gracias Paco!

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