domingo, 23 de octubre de 2016

MARATÓN DE BUDAPEST 2016

Sabía que algún día llegaría este momento y, ahora que tengo la responsabilidad de hacerlo, no sé qué poner. ¡No sé qué palabras elegir para presentar al becario redactor de hoy! Todo lo que se me ocurre para introducir el resumen de la Maratón de Budapest 2016 de este mito viviente del atletismo popular se queda corto o no explica bien lo que pienso. Así que lo haré sin rodeos y con datos...

Josep María Chéliz. Residente en Gavà (Barcelona) pero con Barbastro como segunda casa por motivos familiares, tanto es así que corre con los colores del CAB. Nacido en 1940, tiene 76 años que no aparenta por llevarlos con la alegría, la energía, la educación, la ilusión y las ganas de vivir que ya quisieran (o quisiéramos) muchos jóvenes. A fecha de hoy ha corrido 60 maratones y 149 medias maratones repartidas por todo el mundo y hace dos años fue homenajeado por la organización de la maratón de Barcelona por ser el único ser humano que ha corrido TODAS SUS EDICIONES en la ciudad (sí, las 36). ¡Y lo acojonante es que le queda cuerda para correr muchas más!



Con él he estado y espero estar todavía en muchas carreras y aventuras; pero ahora tengo el HONOR de poder publicar un texto con sus impresiones personales en Budapest. Un texto que, por cierto, escribió a mano en un cuaderno y transcribimos juntos al ordenador en la galería de mi casa con una copita de vino. ¡Una persona que sin duda vale la pena conocer!


-----------------


Voy a correr mi maratón 60 y será en Budapest. Viaje desde Barbastro con buenos amigos, fin de semana perfecto, viaje, ciudad, el Danubio y dominar una vez más los 42km. Cada maratón es una mañana en que la mente siente y se emociona de una forma que solo vivo mientras mis piernas y esa fuerza que tenemos dentro me llevan a ser uno más de esa gran fiesta que es la maratón. 


Ir a Budapest es correr la maratón del Danubio. Más de media carrera junto al río por un circuito magnífico, los puntos de animación constantes y teniendo que destacar (es la primera vez) dos corales espléndidas y en sus escalinatas. Y también una banda militar, música vibrante con su director en posición de saludo (inmóvil) a todos los corredores. 

Las vistas del Danubio y la ciudad, Danubio y parlamento... ¡qué grandiosidad de construcción que no acabas de avanzar (y por dos veces)!. Y cruzar los puentes centenarios, belleza y solidez de los tirantes de hierro. ¡Tantas vistas mientras corro y la mañana avanza!. La temperatura es la buena para correr y el Sol ha estado presente las tres primeras horas, luego se nublará. El Danubio se ha disfrutado con los rayos del Sol. 





En esta maratón correré siguiendo las pautas del entrenador Galloway (el amigo Miguel Pucurrull las recoge en su libro “Mai és tard”). Será la primera vez que correré y caminaré desde el principio, 25 minutos corriendo y 5 minutos a paso rápido de marcha. Caminaré 9 veces y la última será de 4h25 a 4h30. He hecho así entrenos de 20 y 25 kilómetros y la penalización es pequeña conque calculo estar a las 4h30 a 8 kilómetros de meta. 

Mis tres maratones más recientes han sido, claro está, por encima de las 5 horas y la de este año (Barcelona 2016) la de peor tiempo. En el final de esta última, el efecto del calor y la pequeña pendiente de la Avinguda del Paral·lel me hicieron caminar dos veces. 

A Budapest iba con una preparación de 6 semanas a algo más de 40 kilómetros, pero debía añadir dos penalizaciones de caminar 45 minutos en carrera y el sábado de turismo en la ciudad. Situaba mi tiempo en 5h20-5h25min. 


Cumplo el plan establecido, las transiciones de caminar a correr eran fáciles incluso las 4 últimas, estas hasta agradecidas, aunque deseaba volver a correr. 


Un contratiempo a la salida. ¡El pulsador del cronómetro ha desaparecido y no tendré indicación de min/km!. Debo seguir mi plan de carrera con el reloj normal que indica horas y minutos. Los primeros 5 minutos de caminar serán a las 10:15 y los últimos a las 14:15. No puedo saber el tiempo a los 10K y a la media. Corro muy relajado, el circuito y la temperatura son ideales. Mi carrera es buena y sé que estoy recortando minutos. A las 4h30, ahora con cielo nublado, estoy a unos 5K de meta... ¡por lo que he adelantado 3 kilómetros!. Budapest será una buena maratón. Mientras me voy acercando a meta, mis cálculos son que el peaje de caminar más el peaje del día anterior activo han sido borrados por correr con frescura y cómodo de principio a fin. 


En el K37 la meta está linealmente a poco más de 1 kilómetro, llegan voces y música, pero cerca del K38 la carrera entra en un gran parque (Városliget) y en él estaremos casi hasta el final. No hay sol, calles anchas, suelo irregular, grandes árboles, camino sinuoso y ligera subida que se hace larga, peatones que pasean y cruzan, hasta giros de 180º. Desde el K41 el camino es más recto y baja ligeramente. El reloj me dice que faltan bastantes minutos para las 15:00 horas, parece una broma... ¡he corrido sin cronómetro!. Cerca del K42 y todavía dentro del parque, unos momentos con el recuerdo y la emoción de pensar en mi madre, mañana serán 51 años de su muerte. Salida del parque, amplio giro de 180º a la izquierda y en seguida el arco de 100 metros a meta. Sólo me queda el sprint, corro todo lo rápido que puedo hasta cruzarla. Sé que he tardado unos minutos por encima de las 5 horas

Blanca me espera en meta, encuentro y alegría, emoción y alivio, regreso con guía en metro de grafía diabólica al hotel. En las escaleras del metro un chaparrón nos despide, qué bonita lluvia en esos momentos. 




Ya en el hotel será mi amigo Lluís Creixell, compañero durante 25 años de carreras, viajes y entrenos, quien me comunique con un mensaje mi tiempo en la maratón de hoy: 5h03min17seg, segundo lugar de mi categoría S/B2 de más de 75 años. Me cuesta creerlo… pero es cierto. 

Tengo que decir lo bien que ha marchado el grupo (Blanca Pesquer, Pepe Cubelos, Antonio Gibanel, Javi Sampedro y Fernando Torres) en viajes, paseos, comidas y apoyo a carrera. Y yo además, como miembro de más edad del grupo, me he dejado ayudar y querer. Mil gracias. 




Última nota: escribo el miércoles y debo decir que mis piernas el lunes no marcaban recuerdos del trabajo del día anterior. ¡Las pautas Galloway me han funcionado!


------------------

¡Muchas gracias Josep María y que vengan muchas más! ;)

1 comentario: